
Me ocupé de Storify el año pasado porque era una herramienta con muchas promesas: contar historias a partir de contenido extraído de redes sociales y sitios webs. Un recurso muy interesante para lograr una catarata de información que cada usuario puede “curar”, seleccionar, intervenir; según su gusto. Además se puede embeber en tu sitio.
Aun en beta cerrada, en febrero publiqué a modo de experimentación un pequeño relato sobre la compra de The Huffington Post por AOL. Y después nos enteramos que The Stream, el canal “social”, de Al Jazeera, incorporaba esta herramienta para construir historias. Nada menos.
Hace algunas semanas Storify abrió el uso para todos (aunque permanece en beta) y comenzamos a ver algunos resultados.
Les quiero dejar algunas de las historias encontré y demuestran un poco su potencial:
- Guillermo Tomoyose: “Cinco consejos para ir al #MercadoCentral con $100 y no morir en el intento“.
- ElTiempo.com: “Beatificación de Juan Pablo II“.
- Gastón Roitberg: “Ernesto Sabato, contado por Storify.com” y “La muerte de Osama Bin Laden“
- The Washington Post: “Osaba Bin Laden dies“
- Alvaro Liuzzi: “Osama Bin Laden ha muerto (en la web)“.